Y en las noches despero por algunos de sus besos. Quiero sentir sus manos sobre mi cuerpo y poder saborear el suyo con las mías. Sentirme perdida entre sus brazos, fuera del mundo y del gemido más profundo de su placer contemplar el mío. Vagar entre sus curvas buscando mi lugar, llegando al fuego de la satisfacción. Estar presa de su voz y su pasión con todo lo esencial que tiene su ser. Disfrutando de la fantasía que por un momento se hace real o fuera de la realidad disfrutando de la fantasía. Olvidarme del frío sintiendo el calor de su cuerpo cubriendo el mío. Jugando con su lengua hasta el amanecer, viviendo el extremo placer que me da. Excitándonos entre beso y beso, gemido a gemido, con la mente en blanco y la sanación explotando. Persiguiendo lo esencial y no lo cotidiano. Luciendo su belleza sobre la mía. Encontrando la intensidad del movimiento a cada paso. Con la respiración acelerada invocando al desahogo. Sintiendo sus labios suaves y tibios sobre mi pecho, complaciendo en totalidad cada uno de sus rincones. Tocándonos sin motivo aparente, acariciando su cara, entrelazando sus dedos con los míos. Gozando de un éxtasis divino. Sin querer huir, sin tener que soñar, entregándonos al deseo sin controlarlo jamás.

The Violet Rose,,